. : febrero 2011

Aldeanueva del Camino me abre sus puertas en mi primea noche extremeña. (En Baños de Fuentemayor me querían cobrar 12 euros en el Albergue, y eso que era Municipal!, que resultó estar cerrado. Aún así tuvieron la desfachatez de enviarme a la casa de una señora que cobraba el mismo importe. Creo que ésto está fuera de lugar en itinerarios de este tipo).

Desde bastante kilómetros al norte escuchaba la misma canción: "Ya verás como cambia el clima cuando entres en Extremadura". Y, aunque tenía mis reservas, hubo alo que encontré y me confirmó que efectivamente el clima era otro..., insectos!.

Ví moscas, mosquitos (de los que no pican), y hasta alguna abeja libando. Fué entonces cuando caí en la cuenta de que no había visto un solo insecto desde que salí de Ferrol, 11 días antes.

Por primera vez pude pedalear en las horas centrales del día en camiseta, (de manga larga eso sí), sin que necesitara más abrigo. Por primera vez después de muchas noches, ésa, no heló.

Granadilla, Cáparra (Ciudad Romana), Plasencia y Cáceres. Otra ciudad con un casco viejo que ejerce de "túnel del tiempo".

El Tajo se relaja en el Embalse de Alcántara, para volver a ser "él" cuando entra en Portugal.

Mérida, romana hasta la médula, ameniza la llegada a la provincia de Badajoz. El Guadiana la separa y la une.

El sur, conocido como Tierra de Barros, da cuna a dehesas con huéspedes de "pata negra". Zona de toboganes que con la "Cuesta dela Media Fanega", te despide camino a Andalucía.

Cambio de escenario.

Una noche cualquiera. Ésta en el Albergue de Aldeanueva del Camino.

Había nacido la noche anterior, según me contaron.

Paz.

Y tú?, en que calle vives?

Parece ser que no toda la fauna está catalogada.

Paz (2).

No ví a nadie, salvo 2 rebaños de ciervas y alguos milanos.

Cáparra (Ciudad Romana).

La que dá forma al paisaje antropizado de esta zona: La Dehesa.

Albergue de San Gil: Revisando el material.

Mi montura lista. Nunca me dice que nó.

Uf!, adelantando por la derecha!.

800 kilómetros para "salir del armario".

Puente Romano, al lado del Tajo.

Tajo y Alcántara

Tajo y Alcántara (2).

Otro indultado que mira de frente.

Albergue de Casar de Cáceres.

Aaazúcar! para mantenerte en la cresta de la ola.

Valdesalor. Vestuarios del campo de fútbol. Más que suficiente.

En medio.

Tormenta de madera.

Voy un momentito al baño.

Ésto es "atención al cliente", lo demás con tonterías.

El tiempo es realmente bueno. Hay que empezar a gestionar el sol.

Ven pa´cá cordera! No te hagas la estrecha!.

Albergue de Mérida. Revisando el material (2)

Puente Romano de Merida.

1ra. mitad del día: Niebla.

2da. mitad del día: Sol.

CRÓNICA DE UNA NOCHE CUALQUIERA:

01.Se elige el barrio.

02.Se informa uno de los servicios que ofrece.

03.Se elige el pisito.

04.Anochece.

05.Amanece.

06.A por otro barrio.

1000 kilómetros. Es sólo un cifra. Un escalón de esta escalera. Éste está subido.

Más indultados.

De "Pata negra".

Entro en Zamora una fría tarde, 9 horas sobre la bici, con unos desniveles considerables en las piernas, para dar con mis huesos en Lubian, tierra de lobos.
Montaña de rostro duro, que dará paso a una altiplanicie de camino a su capital.
El Duero (Douro, para nuestros primos portugueses) la separa en dos.
Sorprende su Ciudad Vieja. Limpia, mimada. Exquisita la estancia en su albergue, instalaciones y hospitaleros que se esfuerzan por que te sientas como en casa, esas pocas horas que compartes con ell@s. Desde aquí Gracias Mil!.
Salamanca, llena de historia, con una altiva Catedral. El Tormes del Lazarillo lo libré por un puente, romano para más señas.
Más tarde vendrán las primeras dehesas, cuna de toros de lidia. Guijuelo, alta cuna de ibéricos y como despedida, el Pto. de Vallejera con 1.202 mts.
Frío, mucho frío.